Introducción
La Guía que os presentamos es el resultado de la revisión y actualización de una primera versión de recurso didáctico diseñado en 2010 por FETS y Edualter a raíz de la creciente necesidad de introducir el concepto de banca ética a la Educación Secundaria.
Para esta nueva versión se ha contado además con el acompañamiento de un grupo de trabajo de profesoras y profesores de las áreas de Economía, Sociales y Filosofía que durante dos cursos han revisado y aportado sugerencias para la mejora de la Guía.
Bajo esta premisa, los objetivos del material se han ampliado y algunos enfoques iniciales han tomado otras perspectivas, incorporando algunas de las reflexiones que en los últimos años se han ido extendiendo con una intencionalidad crítica y transformadora de la economía.
Cómo ya lo anticipábamos en la primera edición, la transformación de las relaciones y las estructuras sociales del sistema en el cual vivimos pasa necesariamente por la transformación de nuestra manera de consumir, convivir e interrelacionarnos con las personas, los colectivos y el entorno.
Para que sea posible este cambio es necesario también modificar nuestras propias percepciones, ideas preconcebidas (o promovidas) y ser sensibles a las injusticias y desigualdades que desde el propio diseño de las instituciones y sus mecanismos se generan.
El objetivo general de este material, así, es ofrecer al alumnado de secundaria, bachillerato y ciclos formativos las herramientas y reflexiones críticas sobre su propio rol como agente económico y la necesidad de transformar los mecanismos financieros para orientarlos de manera colectiva a un modelo económico más justo, donde las relaciones éticas y el cuidado por el medio ambiente y la vida sean prioritarios, al contrario del que el actual sistema fomenta como la competitividad y el lucro por sobre cualquier cosa.
Finanzas Éticas
Las Finanzas Éticas deben de su origen a los movimientos sociales de los años sesenta y setenta cuando activistas a favor de la paz y el medio ambiente encontraban contradicciones entre sus propuestas y el uso que hacían las entidades financieras de los recursos que depositaban.
Así pues, entidades pacifistas se dan cuenta que las financieras con las cuales trabajan son accionistas de buena parte de las principales empresas de la industria armamentista, o entidades ecologistas empiezan a ver como los financiadores de proyectos que generan daños irreparables en nuestro medio ambiente son las mismas entidades que gestionan sus recursos.
Las Finanzas Éticas intentan dar y construir diferentes respuestas para todas aquellas personas ahorradoras que se quieren responsabilizar de lo que su entidad financiera hace con su dinero
De alguna manera, la propuesta de las Finanzas Éticas parte de la contradicción detectada y ofrece las alternativas a la preocupación de los diferentes colectivos más sensibilizados en temas como la Paz, los Derechos Humanos, el Desarrollo Humano y Sostenible, la Solidaridad y la Justicia Global.
Se han propuesto cinco principios de operación que un banco ético tiene que cumplir y que permite a una persona confiar que su dinero serán destinado a proyectos que se ajusten a una propuesta transformadora más allá del modelo comercial de banca.
El trabajo propuesto con el alumnado a lo largo de esta guía gira alrededor de esta idea, y de promover la coherencia entre nuestras decisiones y nuestras creencias. Confiamos que este camino representará una oportunidad de aprendizaje no solamente por el tema a tratar sino por los recursos (cognitivos y actitudinales) a movilizar en este proceso.